El Banco Mundial está tomando nuevas y audaces medidas para aumentar su capacidad financiera, y ello representa un gran impulso para dar a millones de personas la posibilidad de escapar de la pobreza y mejorar sus condiciones de vida.
En este momento crítico de la historia, y haciéndose eco de los llamados de la comunidad internacional, el Banco redobla sus esfuerzos para abordar desafíos vinculados entre sí: el empleo, el clima, la fragilidad y las pandemias. Estos esfuerzos implican medidas decisivas para construir un Banco mejor que permita lograr un mundo sin pobreza en un planeta habitable.
La labor de la institución incluye un nuevo manual para impulsar un desarrollo de gran impacto y asumir mayores riesgos, ayudando a crear un mundo que incluye a todos, particularmente a las mujeres y los jóvenes, es resiliente ante las crisis y es sostenible.
El Banco ha examinado detenidamente todas las opciones disponibles como parte de un plan de trabajo para hacer rendir al máximo cada dólar y, al mismo tiempo, mantener su calificación crediticia AAA. En conjunto, las medidas anunciadas hoy ampliarán enormemente la capacidad financiera del Banco con el fin de impulsar el crecimiento y el empleo, la vía más segura para salir de la pobreza.
Si no se avanza en este frente, el desarrollo se estancará en el mejor de los casos, y se revertirá en el peor de los casos. En los próximos meses, el Banco concebirá y dará a conocer soluciones adicionales para maximizar su impacto, explorando nuevas oportunidades y, al mismo tiempo, gestionando cuidadosamente los posibles riesgos.
El potencial de estos instrumentos para aumentar el impacto de un solo dólar es transformador. Por ejemplo, cada nuevo dólar podría movilizar seis dólares adicionales en nuevo financiamiento a lo largo de 10 años.
Aumentar el poder de las garantías que pueden otorgar los accionistas del Banco Mundial para incrementar la concesión de préstamos. El programa de garantías de cartera que se propone es un enfoque compartido del riesgo que permitirá aumentar la disponibilidad del financiamiento del Banco Mundial, y la intervención de los accionistas si los países no pueden pagar sus préstamos.
Ello significa que USD 5000 millones en garantías podrían generar USD 30 000 millones en préstamos en un período de 10 años. Tales fondos ayudarán a enviar a más niñas a la escuela, apoyar a los agricultores que enfrentan el cambio climático o proporcionar atención médica vital.
Incrementar el capital híbrido de los accionistas y otros asociados en la tarea del desarrollo. El capital híbrido ofrece una nueva forma de lograr cambios significativos en el desarrollo, al brindar a los accionistas y asociados la oportunidad de invertir en bonos con un potencial especial de apalancamiento. Con USD 1000 millones de capital híbrido, el Banco puede aumentar sus préstamos en hasta USD 6000 millones en un plazo de 10 años e incrementar su impacto en las personas más necesitadas.
Extraer más valor del capital exigible. El capital exigible es un compromiso de los accionistas de aportar nuevos fondos para ayudar al Banco únicamente en circunstancias extremas. Ampliar las condiciones y clarificar los procedimientos y mecanismos, bajo los cuales el Banco puede recurrir a los accionistas, podría ayudar a la institución a absorber más riesgo y aumentar los préstamos. Será necesario seguir trabajando con los organismos de calificación crediticia y los accionistas para aumentar la utilidad del capital exigible.
Avanzar con el mecanismo de financiamiento para crisis de la AIF. Los países más pobres necesitan urgentemente una mayor cantidad de financiamiento en condiciones concesionarias para responder a la emergencia climática, la inseguridad alimentaria y otras crisis. En la actualidad, el Banco recauda fondos para el nuevo mecanismo de financiamiento para crisis de la AIF, que fortalecerá la capacidad de la entidad de ayudar a los países en tiempos difíciles. La meta es conseguir USD 6000 millones, y cada dólar deberá tener un enorme impacto en términos de desarrollo.
Además de las medidas anunciadas hoy, el Banco dio a conocer recientemente otras iniciativas en que el impacto ocupa un lugar central en la labor de la institución. El mes pasado, el Banco puso en marcha el Laboratorio para la Inversión del Sector Privado, que generará, probará y ampliará soluciones de gran impacto que ayuden a eliminar los obstáculos a la inversión en los mercados emergentes.
El Banco también puso a disposición un conjunto de herramientas mejorado para ayudar a los países a responder rápida y eficazmente a los desastres naturales, e inició un esfuerzo para elaborar un nuevo enfoque de seguimiento de los resultados climáticos más eficaz, que mide mejor el impacto, en lugar de los dólares que se proporcionan a los países.
Con información del Banco Mundial.
