EE. UU.
Los mercados financieros de Estados Unidos concluyeron la semana con números en rojo, impactados por la creciente preocupación en torno a la inflación y las potenciales repercusiones de los aranceles comerciales anunciados por el presidente Donald Trump. El índice S&P 500 retrocedió un 0,24%, mientras que el Nasdaq 100 y el Dow Jones Industrial registraron descensos del 0,54% y 0,53%, respectivamente.
El sector tecnológico se vio particularmente afectado, con empresas como Amazon experimentando caídas en sus acciones tras un pronóstico de ganancias que no cumplió con las expectativas del mercado.
Los datos económicos divulgados durante la semana acentuaron los temores sobre las presiones inflacionarias. A pesar de que el mercado laboral mostró signos de moderación, continúa sólido con una tasa de desempleo que descendió al 4%. No obstante, el crecimiento salarial se sumó a la preocupación existente de que la inflación pueda persistir, lo que reduce las expectativas de recortes inmediatos en las tasas de interés por parte de la Reserva Federal (Fed).
Los inversores ahora prevén que la Fed podría postergar hasta septiembre la reducción de las tasas, en lugar de anticiparla para fechas más próximas, como algunos esperaban. Adicionalmente, los anuncios de Trump sobre nuevos aranceles recíprocos la próxima semana añadieron incertidumbre al panorama comercial. Los inversores estarán atentos al próximo informe de inflación (IPC) y a las ventas minoristas para obtener mayor claridad sobre el rumbo de la economía y las políticas monetarias.
Mercado Laboral en EE. UU.
En enero, el mercado laboral de EE. UU. creció a un ritmo más lento de lo previsto, con un aumento de 143.000 empleos no agrícolas, según datos de la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS). Las revisiones anuales revelan un crecimiento promedio mensual de 166.000 empleos en 2024, por debajo de los 186.000 reportados previamente. La tasa de desempleo se mantuvo en el 4,0%. Estos datos sugieren un mercado laboral sólido, aunque en desaceleración, lo que disminuye la probabilidad de recortes de tasas de interés por parte de la Reserva Federal.
Si bien sectores como la minería y los servicios temporales experimentaron caídas en el empleo, la atención médica, el comercio minorista y el gobierno impulsaron la creación de puestos.
Por otro lado, la confianza del consumidor se desplomó en febrero a su nivel más bajo en siete meses, situándose en 67,8 puntos, afectada por la incertidumbre de las políticas arancelarias y el aumento de las expectativas de inflación, que se ubican en 4,3% para los próximos 12 meses y 3,3% para los próximos cinco años. Las condiciones de compra de bienes duraderos también se deterioraron, con una caída de 12 puntos porcentuales respecto a enero.
Banco de Inglaterra (BoE)
El Banco de Inglaterra (BoE) anunció el jueves una reducción de su tasa de interés en un cuarto de punto porcentual, situándola en el 4,5%, en un intento por estimular una economía británica que apenas ha experimentado crecimiento desde mediados de 2024. Esta decisión, aunque anticipada por los economistas, no fue unánime, ya que dos miembros del comité de política monetaria abogaron por un recorte más agresivo, hasta el 4,25%.
El gobernador del BoE, Andrew Bailey, señaló que el banco adoptará un enfoque «gradual y cauteloso» para futuras reducciones de tasas. Esta cautela refleja la complejidad del escenario actual, marcado por una revisión al alza de las previsiones de inflación, que ahora se encuentra cercana al 2,5% y se espera que alcance hasta el 3,7% durante el año, impulsada por el aumento de los precios de la energía, los servicios y el transporte público.
La economía británica enfrenta múltiples desafíos, incluyendo las subidas de impuestos anunciadas por la ministra de Finanzas, el riesgo de una guerra comercial global liderada por el presidente estadounidense Donald Trump y el debilitamiento de la productividad. Estos factores han llevado al BoE a revisar a la baja su pronóstico de crecimiento para 2024, reduciéndolo a la mitad, hasta el 0,75%. Aunque se espera que la inflación retorne al objetivo del 2%, esto no ocurriría hasta finales de 2027, seis meses más tarde de lo previsto anteriormente, lo que subraya la fragilidad del panorama. En este contexto, el BoE mantendrá una política monetaria restrictiva, aunque con margen para nuevos recortes de tasas, dependiendo de la evolución de la inflación y el crecimiento.
U.S. Steel (X)
El presidente Donald Trump anunció que Nippon Steel Corporation realizará una inversión significativa en United States Steel (X) en lugar de adquirirla. Durante una conferencia de prensa con el primer ministro japonés, Shigeru Ishiba, Trump explicó que Nippon acordó llevar a cabo esta inversión para mejorar la calidad de los productos de U.S. Steel, con el respaldo de tecnología japonesa.
Este anuncio se produce tras el bloqueo por parte del expresidente Joe Biden de una oferta de Nippon de 14.900 millones de dólares para comprar U.S. Steel, citando preocupaciones de seguridad nacional. Tanto U.S. Steel como Nippon han llevado el caso a los tribunales, argumentando que Biden actuó inconstitucionalmente.
Mientras tanto, Cleveland-Cliffs (CLF), competidor de Nippon, ha mostrado interés en adquirir U.S. Steel, proponiendo una oferta en efectivo y planeando vender su subsidiaria Big River Steel a Nucor Corporation (NUE), manteniendo la sede de U.S. Steel en Pittsburgh bajo lo que denominó una «Solución totalmente estadounidense».
Energía
En el ámbito nacional, se dio a conocer que Amos Global Energy Management LLC (AGEM), una compañía independiente de petróleo y gas con sede en Houston, Texas, anunció la adquisición de los intereses de Sinopec en los activos de petróleo y gas ubicados en el Golfo de Paria. Estos activos forman parte de la empresa mixta PetroParia. La transacción, sujeta a la aprobación de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) de EEUU y del gobierno venezolano, apuntaría a impulsar la producción de hidrocarburos en el escenario de levantamiento de las sanciones internacionales.
Mientras tanto, la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) ha reanudado la importación de crudo ligero para compensar la disminución de su producción interna, especialmente en la región de Monagas Norte, clave para la obtención de crudos ligeros y medianos. La falta de gas para la reinyección en los yacimientos ha agravado los desafíos operativos de PDVSA, obligándola a buscar alternativas externas. En diciembre y enero, dos buques descargaron alrededor de 600.000 barriles cada uno de crudo ligero no identificado en el terminal José, según documentos y datos de seguimiento de embarcaciones. Aunque uno de los buques partió de China, el origen del crudo sigue sin confirmarse.
Esta situación contrasta con los intercambios de crudo y condensado que PDVSA mantenía con Irán entre 2021 y 2023, los cuales se han estancado debido a deudas y desacuerdos. En 2023, las importaciones de crudo iraní cayeron a 40.000 barriles por día (bpd), frente a los 73.000 bpd de 2022. Aunque PDVSA ha estabilizado el uso de nafta importada de socios como Chevron, la dependencia de crudo extranjero resalta los desafíos que enfrenta la industria petrolera venezolana para mantener su producción y exportaciones en medio de una infraestructura en declive.
En el ámbito internacional, los precios del petróleo cerraron la semana con su tercera caída semanal consecutiva, presionados por el aumento de los inventarios de crudo en Estados Unidos y la incertidumbre generada por las políticas comerciales del presidente Donald Trump. Los futuros del crudo Brent y el West Texas Intermediate (WTI) tocaron sus niveles más bajos desde diciembre, con el WTI cerrando en 71 dólares y el Brent en 74,67 dólares, marcando un descenso semanal de 2,11% y 2,71% respectivamente.
Bolsa de Valores de Caracas
En la Bolsa de Valores de Caracas, entre el 3 y el 7 de febrero de 2025, se negoció un total de 73.168.105 bolívares (unos 241.000 dólares diarios), lo que representa la mitad de lo transado la semana anterior.
Los valores cuyos precios aumentaron en el período fueron Ron Santa Teresa (+20,52%), Mercantil Servicios Financieros Clase A (+18,06%), Inversiones Crecepymes Clase B (+15,38%), Mercantil Servicios Financieros Clase B (+13,45%), Banco Provincial (+10,80%), Corporación Grupo Químico (+9,76%), Fábrica Nacional de Cemento (+6,9)
