Un cierre de enero agridulce para los mercados financieros globales. Si bien los principales índices bursátiles lograron cerrar el mes en terreno positivo, la última semana estuvo marcada por una alta volatilidad, especialmente en Estados Unidos, donde los inversores se enfrentaron a una combinación de expectativas económicas y sorpresas tecnológicas.

El Dow Jones fue el único índice que logró mantenerse a flote, registrando una leve alza del 0,27% en la semana. Sin embargo, el S&P 500 y el Nasdaq Composite, más sensible a los movimientos del sector tecnológico, sufrieron caídas del 1,00% y 1,64% respectivamente. La incertidumbre en torno al sector de la inteligencia artificial, impulsada por el lanzamiento de la plataforma de IA de bajo costo y código abierto de la startup DeepSeek, generó nerviosismo entre los inversores. Aunque las acciones de las grandes tecnológicas se recuperaron parcialmente tras la sacudida inicial, el debate sobre la regulación de la IA se reavivó con fuerza.

La Reserva Federal (FED) mantuvo su tasa de interés sin cambios, en el rango del 4,5%-4,75%, argumentando que la inflación sigue siendo una preocupación, aunque los indicadores económicos sugieren una desaceleración controlada. El oro, considerado un refugio seguro en tiempos de incertidumbre, se mantuvo estable, mientras que el rendimiento de los bonos del Tesoro a 10 años experimentó un ligero descenso.

Europa en el punto de mira:

Al otro lado del Atlántico, el Banco Central Europeo (BCE) anunció un recorte de 25 puntos básicos en los tipos de interés, situando la tasa de depósito en el 2,75%. La presidenta del BCE, Christine Lagarde, advirtió sobre la incertidumbre global y la falta de un camino claro para futuros recortes, a pesar de las expectativas del mercado de nuevas disminuciones en 2025. La economía de la eurozona se enfrenta a desafíos como el estancamiento del crecimiento y la posible imposición de aranceles por parte de Estados Unidos, lo que añade presión sobre el BCE.

Tensiones comerciales y energéticas:

La semana también estuvo marcada por la creciente tensión comercial entre Estados Unidos y sus vecinos del norte y del sur. La Casa Blanca anunció la entrada en vigor de aranceles a México, Canadá y China, como respuesta a la crisis migratoria y el flujo de fentanilo. Esta medida, que afectará a sectores clave como la industria automotriz y la construcción, ha generado preocupación en los mercados y ha provocado la respuesta de México y Canadá, que ya preparan represalias comerciales.

En el mercado energético, los precios del crudo continuaron su tendencia a la baja por segunda semana consecutiva, influenciados por la incertidumbre en torno a los aranceles a Canadá y México, dos de los principales proveedores de petróleo a Estados Unidos. El crudo West Texas Intermediate (WTI) cerró la semana con una caída del 2,9%, cotizando a 72,53 dólares por barril.

En el ámbito local:

La Bolsa de Valores de Caracas registró un notable incremento en el volumen de negociación durante la última semana de enero. Entre los valores más destacados, se encuentran Banco Nacional de Crédito, Banco del Caribe y Banco de Venezuela, que experimentaron importantes alzas en sus cotizaciones.